Causas de la hipertensión arterial
Continuación
En la hipertensión esencial también influyen mucho la dieta y el estilo de vida. La relación entre la sal y la hipertensión es especialmente convincente. Los habitantes de las islas del norte de Japón consumen más sal per cápita que cualquier otra persona del mundo y tienen la mayor incidencia de hipertensión esencial. Por el contrario, las personas que no añaden sal a sus alimentos no muestran prácticamente ningún rastro de hipertensión esencial.
La mayoría de las personas con hipertensión son «sensibles a la sal», lo que significa que cualquier cosa que supere las necesidades corporales mínimas de sal es demasiado para ellos y aumenta su presión arterial. Otros factores que pueden aumentar el riesgo de padecer hipertensión esencial son la obesidad, la diabetes, el estrés, la ingesta insuficiente de potasio, calcio y magnesio, la falta de actividad física y el consumo crónico de alcohol.
Hipertensión secundaria
Cuando se puede identificar una causa directa de la presión arterial alta, la afección se describe como hipertensión secundaria. Entre las causas conocidas de hipertensión secundaria, la enfermedad renal ocupa el primer lugar. La hipertensión también puede ser provocada por tumores u otras anomalías que hacen que las glándulas suprarrenales (pequeñas glándulas situadas encima de los riñones) segreguen cantidades excesivas de las hormonas que elevan la presión arterial. Las píldoras anticonceptivas -especialmente las que contienen estrógenos- y el embarazo pueden aumentar la presión arterial, al igual que los medicamentos que contraen los vasos sanguíneos.