Cuántos corazones tiene el pulpo?

Como si quisieran repartir más amor al universo, los pulpos están equipados no con uno, ni con dos, sino con tres corazones individuales!

Cada uno de estos tres corazones realiza una función única, lo que significa que los tres son igualmente necesarios para el pulpo. Qué hace exactamente cada corazón?

Intentemos refrescar nuestros conocimientos sobre biología y entender por qué el pulpo necesitó evolucionar dos corazones adicionales.

Tres, dos, uno…¡vamos!

Todos los cefalópodos tienen un corazón sobre cada branquia (llamados corazones branquiales) y un corazón central (el sistémico) que bombea la sangre por todo el cuerpo. Los pulpos necesitan aumentar su presión sanguínea para transferir oxígeno a cada uno de sus numerosos músculos funcionales.

Pero las células sanguíneas de los pulpos son ricas en hemocianina de cobre en lugar de hemoglobina de hierro. La sangre rica en cobre no transfiere el oxígeno tan eficazmente como lo haría la sangre rica en hierro. Con menos oxígeno transferido a través de la sangre, la velocidad del pulpo disminuiría significativamente ya que su presión sanguínea no sería lo suficientemente alta para motivar a los músculos. El pulpo sería, por tanto, una presa mucho más fácil para sus enemigos, y podría no haber sobrevivido hasta hoy. Pero los corazones branquiales auxiliares reciben la sangre desoxigenada del cuerpo y la bombean a través de las dos branquias y de vuelta al corazón sistémico. Al mismo tiempo, el corazón sistémico mantiene la circulación de la sangre para los órganos.

¿Estás un poco confundido a estas alturas?

Más sencillamente: Sin corazones, no hay velocidad, no hay pulpo

Casi me da un ataque al corazón

Un pulpo sería el peor nadador de maratón de la historia!

Correr sobre dos de sus brazos es mucho más fácil para un pulpo. Cuando nada, el corazón sistémico se apaga y como resultado el pulpo se cansa muy rápidamente. Por suerte, el pulpo no necesita ser llevado a urgencias. En cuanto el pulpo vuelve a utilizar sus brazos-piernas, el corazón sistémico vuelve a entrar en acción.

Si tiene un pulpo como mascota, es mejor que intente no asustarlo demasiado a menudo golpeando el cristal del acuario. Según los expertos, el corazón sistémico puede perder uno o dos latidos cuando el pulpo se sobresalta.

Más corazones, ¿más amor?¡

Aunque no existe tal prueba científica, nos encantaría pensar que al ser el pulpo una criatura tan adorable, es lógico que el hecho de tener tres corazones le permita amar con más pasión y menos límites.

Sin duda, la curiosidad de tales hechos es lo que hace que nosotros (pobres criaturas de un solo corazón) amemos aún más al pulpo!