El blastocisto de los mamíferos: Desarrollo y células madre

El desarrollo temprano de los embriones de mamíferos se dedica en gran medida a la formación de una población celular pluripotente, conocida como epiblasto (Epi), y a su segregación de dos tejidos extraembrionarios esenciales para la supervivencia y el modelado del embrión en el útero. El epiblasto es el tejido progenitor de la mayoría de las células somáticas y fuente de células madre embrionarias (ES). El desarrollo temprano culmina con la formación del estadio de blastocisto.

El desarrollo del blastocisto ofrece un modelo simple pero relevante para investigar la coordinación del compromiso del linaje celular y la morfogénesis. La formación del blastocisto se caracteriza por dos decisiones binarias sobre el destino celular. La primera conduce a la especificación del trofectodermo (TE) y de la masa celular interna (ICM). En la segunda, las células de la MCI se convertirán en epiblasto pluripotente (Epi) o endodermo primitivo (PrE).

El blastocisto es una etapa única del embrión de la que se pueden derivar directamente células madre que representan cada uno de los linajes celulares constituyentes. Las células madre embrionarias (ES) representan el epiblasto (Epi); las células madre del trofoblasto (TS) representan el trofectodermo (TE), y las células madre del endodermo extraembrionario (XEN) representan el endodermo primitivo (PrE). Estas células madre derivadas del embrión pueden propagarse, diferenciarse e interconvertirse in vitro.

El objetivo de nuestro trabajo es dilucidar los mecanismos que conducen a la especificación y segregación del linaje celular que lleva a la formación de un embrión en fase de blastocisto, utilizando el ratón como modelo experimental. Para lograr este objetivo estamos explotando varios enfoques, incluyendo imágenes en vivo, genética de ratón, manipulaciones de embriones y perfiles de expresión de una sola célula, así como células madre derivadas de embriones.