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El dolor de espalda es una de las razones más comunes por las que las personas visitan al médico. La buena noticia es que el dolor a menudo desaparece por sí solo, y la gente suele recuperarse en una o dos semanas. Muchas personas quieren quedarse en la cama cuando les duele la espalda. Durante muchos años, el reposo en cama era el consejo normal. Pero los estudios actuales recomiendan no guardar reposo en absoluto y subrayan que permanecer en la cama más de 48 horas no sólo no ayuda sino que, de hecho, puede retrasar su recuperación. He aquí por qué:

Quedarse en la cama no le ayudará a mejorar más rápido.
Si tiene un dolor terrible, acostarse durante un día para ayudar a aliviar la angustia puede parecer una buena idea, pero moderar sus actividades y mantenerse activo de forma limitada es una forma más eficaz de controlar sus síntomas. Las investigaciones sugieren que si puede encontrar posiciones cómodas y mantenerse en movimiento, es posible que no necesite reposo en cama en absoluto.
Las investigaciones demuestran que:

• Estar tumbado más de un día o dos no es útil para aliviar el dolor de espalda.
• Las personas pueden recuperarse más rápidamente sin reposo en cama.
• Cuanto antes empiece a moverse, aunque sea un poco, o vuelva a realizar actividades como caminar, más rápido es probable que mejore.

El reposo en cama prolongado puede hacer que la recuperación sea más lenta.
Permanecer en la cama durante cualquier periodo prolongado puede ponerle rígido y aumentar el dolor. Cuando no te mueves ni te agachas, pierdes fuerza muscular y flexibilidad. Con el reposo en cama, se pierde alrededor del 1 por ciento de la fuerza muscular cada día. Y puedes perder entre un 20 y un 30 por ciento en una semana. Se hace más difícil retomar cualquier actividad. A medida que se debilita y se vuelve más rígido, la recuperación es más larga.

¿Quién necesita reposo en cama?
¡Casi nadie! Las únicas personas que pueden requerir reposo en cama son aquellas con fracturas vertebrales inestables a la espera de ser operadas.

¿Qué puedo hacer para el dolor?
Las compresas calientes o frías suelen ayudar. Algunas personas pueden obtener alivio del dolor con analgésicos o antiinflamatorios sin receta como el ibuprofeno (Advil, Motrin) o el naproxeno (Aleve). Pero no debe tomarse ningún medicamento durante un período prolongado.

¿Cuándo debo acudir a un médico?
Debe acudir a su médico de inmediato si:

• Tiene un dolor de espalda grave y continuo que dura más de 48 horas.
• Tiene un dolor de espalda grave y continuo y fiebre.
• Tiene un dolor de espalda acompañado de dolor, entumecimiento o debilidad en una o ambas piernas o pies. Los síntomas de las piernas son más incapacitantes que los de la espalda.
• Tiene dolor de espalda y la aparición de entumecimiento en la región privada/genital o cambios en su capacidad para controlar la función de la vejiga y el intestino.

Maneje el dolor de espalda con ejercicio regular y ayuda profesional según sea necesario
Si tiene un ataque de dolor lumbar que es grave, continuo y no mejora, la evaluación y el tratamiento por parte de un profesional de la salud que se centre en la espalda u otros problemas musculoesqueléticos puede ayudar. Estos profesionales pueden utilizar técnicas activas y pasivas para ayudarle a sentirse mejor. Algunos ejemplos de técnicas pasivas que pueden utilizarse para que se mueva son:

• Calor o hielo
• Ultrasonido
• Manipulación (masaje y movimiento)

Un enfoque activo, como caminar o hacer ejercicios aeróbicos en el agua suele ser el más eficaz. El ejercicio suele ser la mejor manera de aliviar el dolor lumbar.

Consulte con su proveedor de atención médica antes de comenzar un programa de ejercicios.

Trabaje con un experto. Puede ser útil trabajar con un profesional de la salud (como un fisioterapeuta) que pueda explicarle qué actividades son adecuadas para usted.

Elija ejercicios que le gusten. Muchas actividades pueden ayudar a aliviar el dolor de espalda. Intente incluir actividades que fortalezcan los músculos que rodean el tronco, los músculos abdominales y los de la zona lumbar. Los estudios demuestran que las siguientes actividades ayudan a aliviar el dolor de espalda:

• Levantar pesos ligeros
• Yoga
• Caminar y utilizar una cinta de correr
• Aerobic en el agua

No provoque más dolor. Evita los ejercicios que agudicen tu dolor de espalda. Pero el hecho de que puedas tener dolor de espalda con algunas actividades no significa que te hayas hecho daño. Un terapeuta capacitado puede enseñarle sobre el principio de «daño contra daño».

Al comenzar, es posible que desee evitar las sentadillas con las piernas rectas, las elevaciones de piernas mientras está acostado sobre su espalda y los presses de hombros o curls de bíceps mientras está de pie. Una vez que empiece a mejorar, puede añadir ejercicios más complejos para fortalecer la espalda y todos los músculos del tronco.

Únase a un programa de ejercicios para personas con dolor de espalda crónico. Puede que sea más fácil seguir con el ejercicio si no lo haces «solo».