Encuentran cerebro y cráneo en miniatura dentro de un ovario de una niña de 16 añosde 16 años

Por Alice Klein

Se ha encontrado un tumor que contiene un cerebro en miniatura creciendo en el ovario de una niña de 16 años en Japón.años en Japón.

El tumor, de 10 centímetros de ancho, se descubrió cuando la chica fue operada para extirparle el apéndice. Cuando los médicos cortaron el tumor, encontraron mechones de pelo graso y enmarañado en su interior, y una estructura similar a un cerebro de 3 centímetros de ancho cubierta por una fina placa de hueso del cráneo.

Un análisis más detallado reveló que se trataba de una versión más pequeña del cerebelo, que normalmente se encuentra debajo de los dos hemisferios del cerebro. Una masa en uno de los lados se asemejaba a un tronco cerebral, la estructura que normalmente se une a la médula espinal.

Monstruos en el interior

Alrededor de una quinta parte de los tumores de ovario contienen tejido extraño, incluyendo pelo, dientes, cartílago, grasa y músculo. Estos tumores, que normalmente son benignos, reciben el nombre de teratomas por la palabra griega «teras», que significa monstruo.

Aunque se desconoce la causa de los teratomas ováricos, una teoría es que surgen cuando los óvulos inmaduros se vuelven rebeldes, produciendo diferentes partes del cuerpo.

Las células cerebrales se encuentran a menudo en los teratomas ováricos, pero es extremadamente inusual que se organicen en estructuras propiamente cerebrales, dice Masayuki Shintaku, del Centro Médico para Adultos de Shiga (Japón), que estudió el tumor.

Angelique Riepsamen, de la Universidad de Nueva Gales del Sur (Australia), está de acuerdo. «En los teratomas ováricos se registran con frecuencia elementos neuronales similares a los del sistema nervioso central, pero las estructuras que se asemejan al cerebro adulto son raras».

El cerebro en miniatura incluso se desarrolló de tal manera que los impulsos eléctricos podían transmitirse entre las neuronas, como en un cerebro normal, dice Shintaku.

Confusión cerebral

La niña no experimentó ningún síntoma, neurológico o de otro tipo. Sin embargo, ha habido un puñado de informes en todo el mundo de mujeres con teratomas ováricos que han desarrollado cambios de personalidad, pensamientos paranoicos, confusión, agitación, convulsiones o pérdida de memoria.

Algunos de estos síntomas neurológicos pueden surgir cuando el sistema inmunitario reconoce las células cerebrales del ovario como extrañas y lanza un ataque, ya que las células del cerebro real de la mujer pueden acabar siendo atacadas también, lo que provoca una inflamación.

Estos síntomas suelen poder detenerse extirpando el tumor.

A la joven de 16 años se le ha extirpado el tumor sin complicaciones y se ha recuperado bien.