Erupción por la vacuna del sarampión
¿Qué es la erupción por la vacuna del sarampión?
Es una erupción que aparece en alrededor del 5 por ciento de las personas vacunadas contra el sarampión (rubeola). La erupción se parece un poco a la causada por la propia enfermedad: puntos rojos en el pecho y el cuello. En ocasiones, pueden convertirse en protuberancias y, en raras ocasiones, pueden extenderse al resto del cuerpo del niño. El sarpullido suele aparecer unos 10 días después de que su hijo haya sido vacunado, pero a veces aparece a partir del tercer día o hasta el vigésimo octavo. Puede ir acompañada de fiebre leve. Dado que la vacuna suele administrarse en combinación con las vacunas contra las paperas y la rubéola (sarampión alemán) en una mezcla conocida como MMR, puede causar también síntomas leves de paperas y rubéola: hinchazón en los ganglios bajo las orejas o una erupción de color salmón.
¿Qué lo causa?
La erupción es una reacción a la vacuna, que contiene virus vivos, pero debilitados. No se sabe por qué algunos niños tienen la erupción y otros no.
¿Qué puedo hacer al respecto?
No hay tratamiento. La erupción de la vacuna es completamente inofensiva y no es contagiosa. Desaparecerá en pocos días. Si su hijo tiene fiebre, el paracetamol puede calmarla.
¿Cuándo debo llamar al médico?
Si aparece una erupción inmediatamente o en las cuatro u ocho horas siguientes a la vacuna del sarampión, póngase en contacto con un médico de inmediato; su hijo podría estar experimentando una reacción alérgica grave.
Dado que la combinación de sarpullido y fiebre puede ocurrir en un número de diferentes enfermedades o infecciones, llame a su pediatra si su hijo tiene esta combinación, si las manchas del sarpullido son diminutas o de color rojo oscuro, si las manchas no blanquean (se vuelven blancas) cuando usted aplica presión sobre ellas, o si parece inusualmente enfermo.
Si su hijo desarrolla otros síntomas de una reacción alérgica, como dificultad para respirar, hinchazón de los labios y debilidad extrema, llame al 911: Estos podrían ser signos de un shock anafiláctico, una condición que pone en peligro la vida. Este tipo de reacciones a la vacuna son extremadamente raras, pero requieren atención médica inmediata.
Más recursos
El doctor Robert H. Pantell, el doctor James F. Fries y el doctor Donald M. Vickery, Taking Care of Your Child: A Parent’s Illustrated Guide to Complete Medical Care. Da Capo Press. 2005.