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Después de dos años en la pequeña escuela, Shakespeare habría pasado a la escuela de gramática, donde habría estudiado gramática latina*.

Debió de ser durante su estancia en esta escuela cuando aprendió a mirar más allá de la mecánica del lenguaje, hacia la belleza de la literatura. Habría estudiado a Ovidio*, que siguió siendo un gran favorito durante toda su vida, y habría leído a Plauto*, el escritor más admirado de la comedia latina. También se habría introducido en la retórica y en algo de lógica a través de los escritos de Cicerón* y Quintiliano*, así como en la historia del latín, la filosofía y quizás algo de griego rudimentario.

Aunque los niños normalmente asistían a la escuela de gramática hasta los 15 o 16 años, Shakespeare pudo haberse visto obligado a dejar la escuela ya en 1577, a los 13 años, debido a las dificultades financieras de su padre.

No hay constancia de que Shakespeare asistiera a la universidad.

Notas a pie de página

  1. Gramática latina

    En Las alegres comadres de Windsor, William recibe una lección de gramática del profesor galés, Sir Hugh Evans, mientras Mistress Quickly mira… y Shakespeare aprovecha la oportunidad para hacer algunos juegos de palabras subidos de tono:

    Evans: ¿Cuál es tu caso genetivo en plural, William? …
    William: Genetivo, horum, harum, horum.
    Quickly: ¡Venganza del caso de Jenny! ¡Que le pese a ella! Nunca le pongas nombre a su hijo, si es una puta.
    (4.1.58-64)

  2. Un glosario Ovidio La colección de mitos elegantemente relatados en las Metamorfosis de Ovidio fue utilizada por Shakespeare desde el temprano Tito Andrónico hasta la última obra La Tempestad. Plauto Junto con Terencio, el más conocido de los escritores romanos de comedia. Shakespeare utilizó varias obras de Plauto como fuentes, especialmente en La comedia de los errores. Cicerón Orador, filósofo y escritor romano famoso por su estilo de prosa. Vivió en la época de Julio César y Marco Antonio, y fue uno de los «pinchados» por la muerte tras el asesinato de César (véase Julio César, 4.1) Quintiliano De una generación posterior a la de Cicerón, Quintiliano fue también un orador, destacado sobre todo por sus obras escritas sobre retórica, en las que estableció una norma de gusto en el estilo de la prosa latina.

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