La gente llega a tu vida por una razón, pero no todos están destinados a quedarse
La gente llega a tu vida por una razón, pero no todos están destinados a quedarse en ella.
Cada persona con la que se cruzan nuestros caminos presenta una lección importante, y su significado a menudo no cumple con nuestras expectativas.
En nuestro camino de vida conocemos a muchas personas, pero la mayoría de ellas se quedan con nosotros por poco tiempo. Y, a pesar de nuestro deseo de que nunca se vayan, esto es imposible.
Ciertas personas están destinadas a estar en nuestra vida hasta el final, y otras sólo por un tiempo. Pero una cosa es segura: todas las personas con las que se cruzan nuestros caminos nos dan una lección importante, y su significado a menudo no responde a nuestras expectativas. Los mensajes más valiosos suelen venir de aquellos que no han estado cerca durante mucho tiempo.
La gente llega a tu vida por una razón, pero no todos están destinados a quedarse en ella.
Por regla general, el Universo te envía las personas necesarias para el crecimiento. Con algunas de estas personas se establecerá un contacto positivo, pero con otras no. Pero incluso aquellos que nos hacen sufrir y perjudican nuestro estado emocional también juegan un papel importante en tu viaje por este mundo.
A veces los guías más importantes y sabios pasan por nuestra vida sin detenerse. Y no importa quién será: la persona que te ayuda a sobrevivir en el periodo difícil, o la que te lleva de la mano cuando todo te va bien. Es realmente importante saber dejarle marchar cuando llega el momento de decir adiós.
A veces una persona decide marcharse si le resulta demasiado duro estar contigo o le falta algo. Hay una razón para ello, pero al final, tras la ruptura, te convertirás en una mejor versión de ti mismo. En este mundo, todo el mundo tiene que pasar por muchos altibajos.
Si el que ya no está, te alegraba la vida, no te obsesiones con su marcha, simplemente valora el hecho de haberlo conocido. Enorgullécete de haber tenido la oportunidad de vivir lo que vivisteis juntos, y sigue adelante. A pesar de que ya no está cerca, todavía tienes recuerdos comunes y lecciones aprendidas de él.
Las personas llegan a tu vida por una razón, pero no todas están destinadas a quedarse en ella.
Ama a las personas que te rodean e intenta que sepan lo importantes que son para ti. Puede que ni siquiera se den cuenta de que son una parte importante de lo que eres y de lo que llegarás a ser como persona. Son tu sistema de apoyo, sin el cual no estarías donde estás hoy.
Ser consciente de que la vida es un camino sinuoso, y la capacidad de seguirlo te enseña a comprender mejor tus conexiones con otras personas.
No puedes obligar a alguien a permanecer cerca, y la marcha de una persona puede no estar relacionada en absoluto con su deseo de hacerte daño. Al igual que tú, él también tiene su propio camino en la vida, y a veces vuestros caminos no coinciden, a pesar de que queráis hacer lo contrario.
Todo te irá bien, y seguirás siendo lo que debes ser. Las relaciones son importantes, pero no te definen. Si alguien se va, déjalo ir. Eres mejor de lo que crees.