La princesa Diana muere en un accidente de coche
Poco después de la medianoche del 31 de agosto de 1997, Diana, princesa de Gales -conocida cariñosamente como «la princesa del pueblo»- muere en un accidente de coche en París. Tenía 36 años. Su novio, el socialité de origen egipcio Dodi Fayed, y el conductor del coche, Henri Paul, también murieron.
La princesa Diana era una de las figuras públicas más populares del mundo. Su muerte fue recibida con una efusión masiva de dolor. Los dolientes comenzaron a visitar el Palacio de Kensington inmediatamente, dejando ramos de flores en la casa donde la princesa, también conocida como Lady Di, nunca regresaría. Los montones de flores llegaban a unos nueve metros de la puerta del palacio.
Diana y Dodi -que habían estado de vacaciones en la Costa Azul- llegaron a París el día anterior. Salieron del Ritz París justo después de la medianoche, con la intención de ir al apartamento de Dodi en la calle Arsène Houssaye. En cuanto salieron del hotel, un enjambre de paparazzi en motocicletas empezó a seguir agresivamente su coche. Unos tres minutos después, el conductor perdió el control y se estrelló contra un pilar a la entrada del túnel del Puente del Alma.
Dodi y el conductor fueron declarados muertos en el lugar de los hechos. Diana fue trasladada al hospital Pitié-Salpêtrière y declarada muerta a las 6:00 am. (Un cuarto pasajero, el guardaespaldas de Diana, Trevor Rees-Jones, resultó gravemente herido pero sobrevivió). El ex marido de Diana, el príncipe Carlos, así como sus hermanas y otros miembros de la Familia Real, llegaron a París esa mañana. El cuerpo de Diana fue llevado de vuelta a Londres.
Como gran parte de su vida, su muerte fue una sensación mediática en toda regla, y objeto de muchas teorías conspirativas. Al principio se culpó del accidente a los paparazzi que perseguían el coche, pero más tarde se reveló que el conductor estaba bajo los efectos del alcohol y de medicamentos recetados. Una investigación formal concluyó que los paparazzi no causaron la colisión.
El funeral de Diana en Londres, el 6 de septiembre, fue seguido por más de 2.000 millones de personas. Le sobrevivieron sus dos hijos, el príncipe Guillermo, que tenía 15 años en ese momento, y el príncipe Harry, que tenía 12.
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