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Los colores del aula marcan la diferencia

Los colores del aula marcan la diferencia

por Saul Wagner

Cielo azul, hierba verde, sol amarillo. Casi todo en nuestro mundo tiene algún tipo de color asociado. Incluso tenemos refranes que utilizan colores en ellos. Decimos que alguien está «verde de envidia», «blanco como una sábana» o «un cobarde de vientre amarillo». Para pintores, artistas, diseñadores de interiores y vendedores, el uso correcto del color es fundamental para el éxito de su negocio. Pero, ¿sabías que el color también puede jugar un papel importante en el mundo de la educación?

La mayoría de los profesores están de acuerdo en que el color hace que un aula cobre vida. Los muebles escolares de colores y los tablones de anuncios brillantes pueden transformar una sala lisa y aburrida en un lugar brillante y emocionante, capaz de mantener la atención de los niños. Sin embargo, el color puede hacer algo más que animar una habitación; el poder del color es tan fuerte que, si se utiliza de forma incorrecta, puede hacer que los alumnos se vuelvan excitables e hiperactivos. Es importante tener en cuenta la psicología de los colores a la hora de decidir qué colores utilizar y qué colores evitar cuando se piensa en el diseño del aula.

La psicología del color

A lo largo de los años se han realizado numerosos estudios sobre los efectos del color en la psicología y la fisiología de una persona, y los investigadores coinciden en que el color tiene definitivamente un impacto tanto mental como físico en una persona. Algunos colores tienden a ser más relajantes, mientras que otros se consideran estimulantes. Cuando se aplica este conocimiento de la psicología de los colores al aula, se puede ver lo crítico que es asegurar que el diseño del aula logre los máximos resultados cuando se trata de animar a los niños a aprender.

En general, la respuesta al color en el lado cálido de la escala (rojos, naranjas y amarillos) tiende a ser más estimulante. El poder de los colores cálidos en el aula aporta emoción a los niños y aumenta su actividad cerebral. Esto está bien si el objetivo es enseñar a los niños un nuevo concepto o llamar su atención sobre piezas específicas de información; sin embargo, puede no ser apropiado cuando se intenta que se tranquilicen y trabajen en silencio o lean.

La respuesta al color en el lado frío de la escala de colores (azules, violetas, verdes) es la calma y la relajación. Son relajantes e incluso pueden reducir el ritmo cardíaco. Los tonos azules son estupendos para las paredes y el mobiliario escolar de la zona de lectura, donde los alumnos necesitan concentrarse en el libro que tienen en las manos y no en lo que ocurre a su alrededor. El poder del color verde está en estimular el pensamiento creativo y es una buena opción para el aula de arte o el área de escritura creativa.

El color y el mobiliario escolar

Otras pautas para el uso del color en un entorno educativo son las siguientes, extraídas del libro «Color, Environment, and Human Response» de Frank H. Mahnke:

Los colores cálidos y brillantes se recomiendan para las aulas de preescolar y primaria porque complementan la naturaleza extrovertida de los alumnos.

Los colores fríos se recomiendan para las aulas de secundaria y bachillerato por su capacidad de relajación y concentración.

El verde pálido o claro es una buena opción para las bibliotecas porque estos colores potencian la tranquilidad y la concentración.

Aunque muchos profesores no tengan control sobre los colores que se eligen para las paredes y los suelos del diseño de sus aulas, sí tienen cierto control sobre el mobiliario escolar y la decoración de las paredes que se utiliza. Por lo tanto, una buena manera de introducir el color en el aula es mediante el uso del color en los pupitres, las sillas y las estanterías de los alumnos. Utilice sillas de colores vivos en las zonas del aula donde los alumnos deban prestar atención y aprender nueva información. Utilice colores más suaves y fríos en las zonas donde los estudiantes necesitan relajarse y estar más concentrados.

Utilizar colores en los tablones de anuncios no sólo añade interés a la sala, sino que también puede facilitar el aprendizaje. Asegúrese de que los colores utilizados en el tablón se complementan entre sí, y no utilice demasiados colores. Esto puede ser visualmente abrumador para los niños y puede hacer que se desconecten, perdiendo así por completo la información de ese tablero en particular.

Otra nota a tener en cuenta en relación con el color en el diseño del aula: los colores tienen el mismo efecto en los profesores que en los estudiantes. Es importante que los profesores elijan un mobiliario escolar que se adapte a sus propias necesidades y a las de sus alumnos. Al fin y al cabo, ellos también tienen que pasar el día en el aula. El uso de colores relajantes alrededor del escritorio del profesor puede ser justo lo que necesitan para mantenerlos inspirados y motivados cada mañana mientras se preparan para otro día de enseñanza.

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