Metas de negocio vs. Objetivos vs. Estrategias vs. Tácticas
Recientemente me he encontrado con algunos términos sobre los que existe mucha confusión entre la gente de negocios. Estos términos son meta empresarial, objetivo, estrategia y táctica. A primera vista, pueden parecer lo mismo; sin embargo, son totalmente diferentes desde el punto de vista de las organizaciones y transmiten conceptos distintos a diferentes niveles. En las siguientes líneas, explico estos términos junto con un ejemplo para que quede más claro:
Meta empresarial: Los objetivos son los resultados primarios generales hacia los que se dirigen los esfuerzos y las acciones en una empresa. Son los qués, no los cómos y una empresa puede tener múltiples objetivos que alcanzar. Por ejemplo, «debemos ser líderes y aumentar nuestra cuota en el mercado de los préstamos hipotecarios». Normalmente no hay medición en la definición de una meta y sólo le da la dirección general de la empresa.
Objetivo de negocio: El objetivo empresarial difiere de la meta empresarial en el sentido de que son medibles y específicos. En realidad, cuantifica los pensamientos y establece una meta para que la estrategia se pueda planificar en torno a ella. En otras palabras, los objetivos son pasos medibles que una organización da para alcanzar sus metas. Por ejemplo, «aumentar la cuota en el segmento de préstamos para vivienda hasta el 15% a finales del ejercicio 2015». Aunque las metas y los objetivos de negocio son intercambiables, los objetivos de negocio son un subconjunto de las metas de negocio.
Estrategia de negocio: La estrategia es el enfoque de la organización para persuadir a los clientes para que compren los productos o servicios. La estrategia es el cómo, no el qué. Por otra parte, la estrategia es el enfoque de la organización para competir con otras organizaciones para absorber más clientes con el fin de lograr los objetivos. Implica las campañas de marketing y publicidad que se planifican para alcanzar los objetivos. «Por ejemplo, convencer a los clientes de que nuestro producto de préstamo hipotecario es el mejor del mercado mediante anuncios en televisión y en Internet».
Táctica: Las tácticas son acciones o herramientas que una organización lleva a cabo para alcanzar los objetivos asociados a una estrategia. Son los qués, no los cómos. Las estrategias y las tácticas deben trabajar en conjunto, sin táctica la organización tiene un gran pensador y ninguna acción. En otras palabras, la organización necesita tanto grandes alas (estrategias) como pies (tácticas). Por ejemplo, «Crear un nuevo producto de préstamo hipotecario con un tipo de interés reducido y una comisión de administración de cero dólares».
Para aprovechar al máximo estos conceptos y hacer avanzar las capacidades de su organización, eduque a su organización sobre las diferencias de los términos y explique lo que espera de ellos. Un equipo puede dedicarse al desarrollo de estrategias, mientras que otro equipo se dedica a las tácticas. Asegúrese de que todas las tácticas se ajustan a las estrategias y de que todas las estrategias tienen en cuenta las tácticas. No olvide que las metas, los objetivos, las estrategias y las tácticas dependen las unas de las otras y funcionan en tándem.