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Nación del Islam

Artículo principal: Creencias y teología de la Nación del Islam
Líder de la Nación del Islam (desde 1981) Louis Farrakhan

La Nación del Islam cree en un solo Dios, cuyo nombre es Alá. Identifican a Alá con su fundador, Fard Muhammad, a quien también consideran el Mesías prometido y el Mahdi.

Una plataforma de la Nación del Islam denominada «El Programa Musulmán» fue escrita por Elijah Muhammad en su libro Message to the Blackman in America en 1965.La plataforma afirma la creencia en el Corán y en otras escrituras proféticas; también afirma la verdad de la Biblia, pero sostiene que la Biblia ha sido manipulada y debe ser reinterpretada. La plataforma también enseña que habrá una resurrección de los muertos justos, pero que esta resurrección será mental y no física.

Se han esbozado otras creencias en libros, documentos y artículos publicados por la organización, y en discursos de Elijah Muhammad, Malcolm X, Farrakhan y otros ministros. Las lecciones que supuestamente pasaron de Fard a Elijah Muhammad se publicaron como La Sabiduría Suprema. Muchas de las enseñanzas de Elijah Muhammad se pueden encontrar en Mensaje al negro en América.

CosmologíaEditar

Elijah Muhammad dijo una vez que la Luna fue una vez una parte de la Tierra, y que la Tierra tiene más de 76 billones de años. Toda la masa terrestre de la Tierra se llamaba «Asia». Esto fue, según Elijah Muhammad, mucho antes de Adán.Elijah Muhammad declaró que los negros de América son descendientes de la nación negra asiática y de la tribu de Shabazz. Escribe en la página 31 de su libro «Mensaje a los negros de América»: «…¿quién es esta tribu de Shabazz? Originalmente, ellos fueron la tribu que vino con la tierra (o esta parte) hace 66 trillones de años cuando una gran explosión en nuestro planeta lo dividió en dos partes. Una la llamamos Tierra y la otra Luna. Esto lo hizo uno de nuestros científicos, Dios, que quería que la gente hablara una sola lengua, un solo dialecto para todos, pero no pudo lograrlo.»

SeparatismoEditar

Miembros de la Nación del Islam, San Francisco, California, 1994

En una entrevista del 13 de abril de 1997 en el programa Meet the Press de la NBC, Tim Russert pidió a Farrakhan que explicara la opinión de la Nación del Islam sobre la separación:

Tim Russert: «Una vez a la semana, en la última página está El Programa Musulmán, ‘Lo que los musulmanes quieren’ . El primero es en términos de territorio, ‘Ya que no podemos llevarnos bien con ellos en paz e igualdad, creemos que nuestras contribuciones a esta tierra y el sufrimiento forzado sobre nosotros por la América blanca justifica nuestra demanda de separación completa en un estado o territorio propio.’ ¿Es ese su punto de vista en 1997, un estado separado para los negros americanos?»

Ministro Louis Farrakhan: «Primero, el programa comienza con el número uno. Ese es el número cuatro. La primera parte de ese programa es que queremos libertad, una libertad plena y completa. La segunda es que queremos justicia. Queremos una justicia equitativa ante la ley, y queremos que la justicia se aplique por igual a todos, independientemente de la raza o la clase o el color. Y la tercera es que queremos igualdad. Queremos ser miembros de la sociedad en igualdad de condiciones con los mejores de la sociedad civilizada. Si podemos conseguir eso dentro del sistema político, económico y social de Estados Unidos, no es necesario el punto número cuatro. Pero si no podemos llevarnos bien en paz después de haber dado a América 400 años de nuestro servicio y sudor y trabajo, entonces, por supuesto, la separación sería la solución a nuestro problema racial.»

AutodeterminaciónEditar

Si bien la separación de las razas fue siempre el objetivo de la Nación del Islam, todo surgió del deseo de desbaratar la actitud moral y normativa que la filosofía y la religión occidentales impusieron durante el colonialismo. Con una estética diferente y un rechazo de los ideales normativos, y con una nación diferente, la Nación del Islam quería esencialmente la agencia y la autodeterminación en el desarrollo económico de sus propias vidas. Veían que la única forma de salir del pasado era con un futuro radicalmente diferente.

«Por ejemplo, para combatir la erradicación de la religiosidad negra practicada inicialmente por los africanos esclavizados, la NOI introdujo o, en algunos casos, reintrodujo el Islam, una religión que históricamente había desafiado las ideas religiosas occidentales. Además, para hacer frente a los esfuerzos por borrar otros aspectos de la cultura africana, como los nombres, la vestimenta, la alimentación, la educación, la socialización y las prácticas matrimoniales, la NOI construyó una nueva forma de vida. Dado que la autodeterminación de los negros seguía siendo su objetivo principal, la NOI se centró en el diseño de ropa y uniformes únicos, en la introducción de pasteles de frijoles y otros cambios en la dieta y en la creación de sus escuelas negras privadas y de un plan de estudios centrado en la cultura. Por último, la Nación creó un plan económico que preveía una empresa de colaboración basada en el control no europeo. Todas estas iniciativas pretendían reparar a los negros y prepararlos para una participación activa en la cada vez más liberada comunidad global no europea, en particular, pero no exclusivamente, en África.»

En su búsqueda de la autodeterminación, muchos afroamericanos recurrieron al cristianismo para reclamar la autonomía de sus cuerpos históricamente castrados y mancillados. Sin embargo, el problema para muchos fue que el cristianismo se utilizó para justificar la violencia de género. Edward E. Curtis señala que el cristianismo se utilizó junto con el nacionalismo estadounidense y, por lo tanto, se malinterpretó a propósito para dar argumentos a favor de la continuación de la esclavitud. Por lo tanto, una nueva autonomía del cuerpo humano, según los miembros de la Nación del Islam, no podía encontrarse en el cristianismo. Ya estaba arraigada con los ideales occidentales. El islam, según ellos, era una forma de volver a la herencia africana, a una identidad panafricana, a una reimaginación de los cuerpos afroamericanos y, por tanto, a un futuro poscolonial comprensible. Por supuesto, esta naturaleza poscolonial de la autodeterminación no podía lograrse dentro de las nociones de amor propio Según los de la nación del Islam, este amor propio no podía practicarse bajo la democracia estadounidense y en los tribunales estadounidenses. La autodeterminación (alimentada por el amor a uno mismo y a los demás) sólo podía encontrarse en la fe islámica suní y en la separación de las instituciones estadounidenses.

Enseñanzas sobre la razaEditar

Miembros de la Nación del Islam en el Speakers’ Corner de Hyde Park, Londres, marzo de 1999.

Wallace Fard Muhammad enseñó que los pueblos originales del mundo eran negros y que los blancos eran una raza de «demonios» creada por un científico llamado Yakub (el Jacobo bíblico y coránico) en la isla griega de Patmos. Según las lecciones de sabiduría suprema, Fard enseñaba que los blancos eran demonios debido a la cultura de la mentira y el asesinato que Yakub instituyó en la isla para asegurar la creación de su nuevo pueblo. Fard enseñó que Yakub estableció una política secreta de eugenesia entre la clase dirigente de la isla. Debían matar a todos los bebés oscuros al nacer y mentir a los padres sobre el destino del niño. Además, debían asegurarse de que los niños de piel más clara prosperaran en la sociedad. Esta política fomentaba una preferencia general por la piel clara. Era necesario permitir el proceso de injerto o creación de una raza de personas de piel más clara que fuera diferente. La idea era que si se permitía a las personas de piel clara aparearse libremente con las de piel oscura, la población seguiría siendo de piel oscura debido al dominio genético de las personas de piel oscura originales. Este proceso tardó aproximadamente 600 años en producir un grupo de personas de pelo rubio y ojos azules. Cuando emigraron al continente, fueron recibidos y acogidos por los indígenas allá donde iban. Pero, según las lecciones de sabiduría suprema, empezaron a crear problemas entre la gente honrada, diciendo mentiras y causando confusión y travesuras. Fue entonces cuando la clase dirigente de Oriente Medio decidió reunir a todos los alborotadores que pudo encontrar y hacerlos marchar, sobre las arenas calientes del desierto, hacia las cuevas y laderas de Europa. Elías afirmó que esta historia es bien conocida y conservada, y que se ritualiza o recrea en muchas organizaciones fraternales y sociedades secretas. Fard enseñó que gran parte de las formas salvajes de la gente blanca provienen de haber vivido en las cuevas y laderas de Europa durante más de 2.000 años sin revelación divina ni conocimiento de la civilización. Los escritos de Elijah Muhammad aconsejan que el estudiante debe aprender que el hombre blanco es «el Diablo injertado de Yacub» y «el Zorrillo del planeta Tierra».

La Nación del Islam enseña que el pueblo negro es el pueblo original, y que todos los demás pueblos provienen de él. Farrakhan ha afirmado, en relación con la ascensión espiritual, que «si miras a la familia humana -ahora, hablo de negros, morenos, rojos, amarillos y blancos- todos parecemos estar congelados en un nivel de existencia infrahumano. En el Islam, y creo que también en la teología cristiana y judía, hay tres etapas de desarrollo humano. La primera etapa se denomina etapa de desarrollo animalista. Cuando nos sometemos a las pasiones animales, podemos hacer cosas malas a los demás en esa etapa de desarrollo animalista. Pero cuando llega la conciencia moral y tenemos un espíritu autoacusador, es entonces cuando nos convertimos en seres humanos. Ahora mismo, tenemos el potencial de humanidad, pero no hemos alcanzado ese potencial, porque estamos funcionando en el plano animalista de la existencia.»

El Negro es el hombre original. De él surgieron todos los morenos, amarillos, rojos y blancos. Mediante el uso de un método especial de la ley de control de la natalidad, el Blackman fue capaz de producir la raza blanca. Este método de control de la natalidad fue desarrollado por un científico negro conocido como Yakub, que preveía hacer y enseñar una nación de personas que serían diametralmente opuestas al Pueblo Original. Una raza de gente que un día gobernaría al pueblo original y a la tierra por un período de 6.000 años. Yakub prometió a sus seguidores que injertaría una nación de su propio pueblo, y les enseñaría cómo gobernar a su pueblo, a través de un sistema de trucos y mentiras mediante el cual utilizan el engaño para dividir y conquistar, y romper la unidad del pueblo más oscuro, poner a un hermano contra otro, y luego actuar como mediadores y gobernar ambos lados.

– Elijah Muhammad.

En una entrevista en el programa Meet the Press de la NBC, Farrakhan dijo lo siguiente en respuesta a la pregunta del presentador Tim Russert sobre las enseñanzas de la Nación del Islam sobre la raza:

No es irreal creer que los blancos -que genéticamente no pueden producir amarillos, marrones o negros- tengan un origen negro. Los eruditos y científicos de este mundo están de acuerdo en que el origen del hombre y de la humanidad comenzó en África y que el primer padre del mundo fue negro. El Corán dice que Dios creó a Adán de barro negro y le dio forma. Entonces, si la gente blanca vino del pueblo original, el pueblo negro, ¿cuál es el proceso por el que llegó a la vida? No es una pregunta tonta. Es una pregunta científica con una respuesta científica. No sugiere que seamos superiores o que ustedes sean inferiores. Sugiere, sin embargo, que tu nacimiento o tu origen es de los negros de esta tierra: la superioridad y la inferioridad está determinada por nuestra rectitud y no por nuestro color.

Elijah Muhammad dirigiéndose a sus seguidores, incluido el campeón de boxeo Muhammad Ali, 1964

Preguntado por Russert sobre si estaba de acuerdo con la predicación de Elijah Muhammad de que los blancos son «demonios de ojos azules», Farrakhan respondió:

Bueno, ustedes no han sido santos en la forma en que han actuado con los pueblos más oscuros del mundo y hasta con su propia gente. Pero, en verdad, señor Russert, cualquier ser humano que se entregue a hacer el mal podría ser considerado un demonio. En la Biblia, en el «Libro del Apocalipsis», se habla de la caída de Babilonia. Dice que Babilonia ha caído porque se ha convertido en la morada de los demonios. Creemos que la antigua Babilonia es un símbolo de una Babilonia moderna, que es Estados Unidos.

Durante la época en que Malcolm X era miembro y líder de la Nación del Islam, predicaba que los negros eran genéticamente dominantes a los blancos, pero que estaban dominados por un sistema de supremacía blanca:

Los blancos reflexivos saben que son inferiores a los negros. Hasta Eastland lo sabe. Cualquiera que haya estudiado la fase genética de la biología sabe que el blanco se considera recesivo y el negro dominante. Toda la economía estadounidense se basa en la supremacía blanca. Incluso las filosofías religiosas, en esencia, la supremacía blanca. Un Jesús blanco. Una Virgen blanca. Ángeles blancos. Todo blanco. Pero un Diablo negro, por supuesto. El fundamento político del «Tío Sam» se basa en la supremacía blanca, relegando a los no blancos a una ciudadanía de segunda clase. Ni que decir tiene que la filosofía social es estrictamente supremacista blanca. Y el sistema educativo perpetúa la supremacía blanca.

Después de que Malcolm X hiciera su peregrinaje a la Meca, declaró que ver a los musulmanes de «todos los colores, desde los rubios de ojos azules hasta los africanos de piel negra», interactuando como iguales, le llevó a ver el Islam como un medio por el que se podrían superar los problemas raciales. Atribuye a su evolución de las opiniones sobre el islam y la raza la razón por la que abandonó la Nación del Islam y su decisión de convertirse al islam suní.

La Nación del Islam enseña que los matrimonios mixtos o la mezcla de razas deben estar prohibidos. Este es el punto 10 de la plataforma oficial, «Lo que quieren los musulmanes», publicada en 1965. Sin embargo, Farrakhan declaró en la entrevista con Tim Russert:

La madre del Líder que vino a Norteamérica a enseñarnos, Fard Muhammad, Su madre era una mujer blanca. Su padre era un hombre negro. Así que donde hay amor, el amor trasciende nuestra denominación racial o etnia. El amor es el gran poder de transformación. No creo que podamos decir que cuando dos personas están enamoradas no deban casarse entre sí. Pero preferiría que el negro y la negra se casaran en su propia especie.

El Plano Madre y la Rueda de EzequielEditar

Artículo principal: La Rueda de Ezequiel

Elijah Muhammad enseñó a sus seguidores sobre un Plano Madre o Rueda, un OVNI que fue visto y descrito en las visiones del profeta Ezequiel en el «Libro de Ezequiel», en la Biblia hebrea.

Ahora que miraba a los seres vivos, vi una rueda en la tierra junto a los seres vivos, una para cada uno de ellos. En cuanto a la apariencia de las ruedas y su construcción: su apariencia era como el brillo del berilo. Y las cuatro tenían la misma semejanza, siendo su apariencia y construcción como una rueda dentro de otra rueda. Cuando iban, lo hacían en cualquiera de sus cuatro direcciones sin girar mientras avanzaban. Y sus bordes eran altos e imponentes, y los bordes de los cuatro estaban llenos de ojos alrededor.

-Ezequiel 1:15-18 (ESV)

Farrakhan, comentando la descripción de su maestro en 1996, dijo lo siguiente:

El Honorable Elijah Muhammad nos habló de un gigantesco Plano Madre que está hecho como el universo, esferas dentro de esferas. Los blancos los llaman objetos voladores no identificados (ovnis). Ezequiel, en el Antiguo Testamento, vio una rueda que parecía una nube de día, pero una columna de fuego de noche. El Honorable Elijah Muhammad dijo que esa rueda fue construida en la isla de Nippon, que ahora se llama Japón, por algunos de los científicos originales. Se necesitaron 15 mil millones de dólares en oro en ese momento para construirla. Está hecha del acero más resistente. Estados Unidos aún no conoce la composición del acero utilizado para fabricar un instrumento como éste. Es un plano circular, y la Biblia dice que nunca hace giros. Debido a su naturaleza circular puede detenerse y viajar en todas las direcciones a velocidades de miles de kilómetros por hora. El dijo que hay 1,500 pequeñas ruedas en esta Rueda Madre, que es de media milla por media milla . Esta Rueda Madre es como un pequeño planeta construido por humanos. Cada uno de estos pequeños aviones lleva tres bombas.

El Honorable Elijah Muhammad dijo que estos aviones fueron utilizados para establecer montañas en la tierra. El Corán lo dice así: Hemos levantado montañas en la tierra para que no se convulsione con vosotros. ¿Cómo se levanta una montaña, y cuál es el propósito de una montaña? ¿Has intentado alguna vez equilibrar un neumático? Se utilizan pesos para mantener el neumático equilibrado. Así es como se equilibra la tierra, con las cordilleras. El Honorable Elijah Muhammad dijo que tenemos un tipo de bomba que, cuando golpea la tierra un taladro en ella está programado para entrar en la tierra y explotar a la altura que usted desea que la montaña sea. Si quieres que la montaña suba una milla, cronometras el taladro para que entre una milla y luego explote. Las bombas que tienen estos aviones están cronometradas para bajar una milla y hacer subir una montaña de una milla de altura, pero destruirá todo en un radio de 50 millas cuadradas. El hombre blanco escribe en sus memorandos de alto secreto sobre los OVNIs. Los ve alrededor de sus instalaciones militares como si estuvieran espiando.

Esa Madre Rueda es una cosa de aspecto espantoso. Los blancos están haciendo películas ahora para hacer que estos aviones parezcan ficción, pero se basa en algo real. El Honorable Elijah Muhammad dijo que la Madre Rueda es tan poderosa que con el sonido que reverbera en la atmósfera, sólo con un sonido, puede derrumbar edificios.

– Louis Farrakhan, La Divina Destrucción de América: ¿Puede evitarla?

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