Pasas
Resumen del tema aportado por voluntario(s): Miranda
Las pasas, aunque no son tan ricas en fitonutrientes como algunos frutos secos, pueden seguir considerándose un tentempié saludable con una variedad de beneficios positivos para la salud.
Beneficios de las pasas para la salud
Las pasas, en particular las grosellas y las pasas doradas, son una buena fuente de antioxidantes antiinflamatorios. También son ricas en fibra, que promueve la saciedad y puede disminuir el consumo total de calorías cuando se consumen antes de una comida rica en calorías. La fibra también favorece el crecimiento de bacterias saludables en nuestro intestino grueso, lo que favorece nuestro sistema inmunitario y ayuda a prevenir infecciones. Esto puede ser especialmente útil para que las mujeres embarazadas eviten el parto prematuro, que se cree que está provocado, al menos en parte, por la inflamación. La abundancia de bacterias intestinales saludables también puede ayudar a reducir el colesterol en la sangre y puede ser la razón por la que el consumo de pasas ha demostrado ser capaz de reducir el colesterol LDL hasta un 13%, aunque este efecto también podría ser mediado a través de algún otro fitonutriente que se encuentra en la pulpa o la piel de la uva. Por último, las pasas son ricas en azúcares simples, lo que puede ser útil para los atletas de resistencia que intentan mejorar su rendimiento durante las carreras.
Las pasas y las caries
La preocupación de que las pasas ricas en azúcares y con textura masticable puedan favorecer la aparición de caries ha sido ampliamente discutida en la comunidad médica durante varias décadas. Aunque estudios recientes han indicado que los ácidos y los azúcares de las frutas y los zumos de frutas pueden efectivamente ablandar el esmalte de los dientes, la formación de caries no se debe únicamente a la acidez, sino también a la actividad bacteriana. Los fitonutrientes de las pasas parecen inhibir la actividad promotora de la caries de las bacterias orales. Además, los residuos de las pasas se eliminan mucho más rápidamente de la superficie de los dientes que muchos otros alimentos, como las patatas fritas, las galletas o los bizcochos.