Síntomas y causas de la incontinencia fecal
¿Cuáles son los síntomas de la incontinencia fecal?
Los síntomas de la incontinencia fecal dependen del tipo.
- Si tiene incontinencia fecal de urgencia, sabrá cuándo necesita defecar pero no podrá controlar la defecación antes de llegar al baño.
- Si tiene incontinencia fecal pasiva, expulsará heces o mucosidad por el ano sin saberlo.
- enfermedad inflamatoria intestinal
- síndrome del intestino irritable
- proctitis
- cirugía para
- extraer el cáncer en el ano o el recto
- extraer las hemorroides
- tratar abscesos anales y fístulas
- trauma
- un hábito a largo plazo de esforzarse para defecar
- una lesión cerebral
- una lesión de la médula espinal
- demencia
- esclerosis múltiple
- enfermedad de Parkinson
- infarto cerebral
- diabetes tipo 2
- tu bebé era grande
- se utilizaron fórceps para ayudar a dar a luz a tu bebé
- tuviste un parto asistido por vacío
- el médico hizo un corte, llamado episiotomía en tu zona vaginal para evitar que la cabeza del bebé desgarre tu vagina durante el parto
Algunos expertos médicos incluyen rayas o manchas de heces o mucosidad en la ropa interior -llamadas suciedad- como síntoma de incontinencia fecal.
¿Cuándo debo consultar a un médico por la incontinencia fecal?
Debe consultar a un médico si su incontinencia fecal es frecuente o grave. Aunque algunas personas son capaces de controlar la incontinencia fecal leve o poco frecuente por sí mismas, debe acudir al médico si la incontinencia fecal afecta a su calidad de vida o le causa malestar emocional o social.
¿Qué causa la incontinencia fecal en adultos?
La incontinencia fecal tiene muchas causas, entre ellas los trastornos del tracto digestivo y las enfermedades crónicas. Algunas causas de incontinencia fecal, como el parto por vía vaginal, sólo se dan en mujeres.
Diarrea
Las heces sueltas y acuosas de la diarrea llenan el recto rápidamente y son más difíciles de retener que las heces sólidas. La diarrea es el factor de riesgo más común de incontinencia fecal para las personas que no están en hospitales, residencias de ancianos u otras instituciones similares. La diarrea puede estar causada por problemas del tracto digestivo como
Estreñimiento
El estreñimiento puede provocar heces grandes y duras que son difíciles de expulsar. Las heces duras se estiran y, con el tiempo, debilitan los músculos del recto. Los músculos debilitados permiten que las heces acuosas que se acumulan detrás de las heces duras se filtren.
Lesión o debilidad muscular
Si los músculos del ano, del suelo pélvico o del recto están lesionados o debilitados, puede que no sean capaces de mantener el ano cerrado, dejando que las heces se filtren. Estos músculos pueden lesionarse o debilitarse por
Daños en los nervios
Si los nervios que controlan su ano, el suelo pélvico y el recto están dañados, los músculos no pueden trabajar como deberían. El daño a los nervios que le indican cuándo hay heces en el recto hace que sea difícil saber cuándo necesita buscar un baño. Los nervios pueden resultar dañados por
Enfermedades neurológicas
Las enfermedades neurológicas que afectan a los nervios del ano, el suelo pélvico o el recto pueden causar incontinencia fecal. Estas enfermedades incluyen
Pérdida de estiramiento en el recto
Si su recto está cicatrizado o inflamado, se vuelve rígido y no puede estirarse tanto para retener las heces. Su recto puede llenarse rápidamente y las heces pueden salirse. La cirugía rectal, la radioterapia en la zona pélvica y la enfermedad inflamatoria intestinal pueden causar cicatrices e inflamación en el recto.
Hemorroides
Las hemorroides pueden impedir que los músculos que rodean el ano se cierren por completo, lo que permite que salgan pequeñas cantidades de heces o mucosidad.
Prolapso rectal
El prolapso rectal -una afección que hace que el recto baje por el ano- también puede impedir que los músculos que rodean el ano se cierren por completo, lo que permite que salgan pequeñas cantidades de heces o mucosidad.
Inactividad física
Si no es físicamente activo, especialmente si pasa muchas horas al día sentado o tumbado, puede retener muchas heces en el recto. Las heces líquidas pueden entonces filtrarse alrededor de las heces más sólidas. Los adultos mayores y frágiles son los más propensos a desarrollar incontinencia fecal relacionada con el estreñimiento por esta razón.
El parto por vía vaginal
El parto a veces provoca lesiones en los esfínteres anales, lo que puede causar incontinencia fecal. Las posibilidades son mayores si
Rectocele
El rectocele es una condición que hace que tu recto sobresalga a través de la vagina. El rectocele puede ocurrir cuando la fina capa de músculos que separa el recto de la vagina se debilita. Las heces pueden permanecer en el recto porque el rectocele dificulta la expulsión de las heces.
¿Qué causa la incontinencia fecal en los niños?
Para los niños mayores de 4 años, la causa más común de la incontinencia fecal es el estreñimiento con una gran cantidad de heces en el recto. Cuando esto ocurre, el niño puede no ser capaz de percibir cuándo llega una nueva deposición al recto. El niño puede no saber que necesita defecar. Una gran cantidad de heces en el recto puede hacer que los esfínteres anales internos se relajen de forma crónica, lo que permite que las heces blandas se filtren alrededor de las heces duras en el recto y se escapen.
Los defectos congénitos del ano, el recto o el colon, como la enfermedad de Hirschsprung, pueden causar incontinencia fecal en los niños. Estos defectos de nacimiento pueden debilitar los músculos del suelo pélvico o dañar los nervios del ano o del recto. Las lesiones de los nervios del ano y el recto también pueden causar incontinencia fecal, al igual que las lesiones de la médula espinal y los defectos congénitos de la misma.