Usos, beneficios y efectos secundarios de la sal de Epsom
Una persona con alguna condición médica subyacente debe hablar con su médico antes de probar la sal de Epsom. Las personas que viven con una enfermedad renal no deben consumir sal de Epsom.
El magnesio de los suplementos orales o de un baño de sal de Epsom puede proporcionar los siguientes beneficios para la salud:
Mejorar el rendimiento del ejercicio y la recuperación
Algunas personas toman magnesio antes de un entrenamiento. Esto puede ayudar a eliminar el ácido láctico que se acumula en los músculos durante el ejercicio y mejorar el rendimiento futuro.
En un pequeño estudio de 2015, los investigadores encontraron que la suplementación de magnesio a corto plazo se asoció con un mejor rendimiento en el levantamiento de pesas entre 13 atletas.
Cuando una persona toma magnesio después de un entrenamiento, también puede reducir el tiempo de recuperación y prevenir el dolor muscular. En un estudio en animales de 2014, los investigadores trataron a ratas con sulfato de magnesio o solución salina antes de colocarlas en una cinta de correr.
Las ratas que recibieron sulfato de magnesio tuvieron mayores niveles de glucosa durante el ejercicio y eliminaron el ácido láctico más rápido durante la recuperación.
Alivio del dolor
Las personas que no tienen suficiente magnesio pueden experimentar calambres musculares dolorosos e inflamación crónica. Las condiciones de salud subyacentes, como la diabetes tipo 2 o las enfermedades gastrointestinales, como la enfermedad de Crohn y la enfermedad celíaca, también pueden afectar a la absorción de magnesio.
Un baño de sal de Epsom puede ayudar a calmar los músculos doloridos y reducir la inflamación. Sin embargo, los expertos no tienen claro si la sal de Epsom es directamente responsable de estos efectos.
Alivio del estrés
El magnesio contribuye a la síntesis y el metabolismo de los neurotransmisores. Los neurotransmisores son sustancias químicas que transportan señales entre las neuronas, o células nerviosas. Estos mensajeros químicos impactan en todos los aspectos de la vida diaria, incluyendo el sueño, el estado de ánimo y la concentración.
Según una revisión de 2017 en la revista Nutrients, tener niveles bajos de magnesio podría perjudicar la calidad del sueño y la capacidad de una persona para hacer frente al estrés.
Si una persona toma un baño de sal de Epsom, podría ayudar a su piel a absorber el magnesio, lo que podría aliviar el estrés y promover la relajación. Pero, otros estudios que investigan esto muestran resultados contradictorios.
Tratamiento del estreñimiento
Para muchas personas, tomar sal de Epsom es generalmente seguro. Sin embargo, quienes padecen enfermedades renales o cardíacas, las mujeres embarazadas y los niños no deben consumirla. Una persona debe hablar con su médico si no está segura de beber sal de Epsom.
Las personas pueden utilizar la sal de Epsom como un laxante para tratar el estreñimiento. Este método de tratamiento consiste en disolver una pequeña cantidad de sal de Epsom en agua y beber la mezcla.