Beneficios Protectores y Calmantes del Óxido de Zinc

¿Qué es el Óxido de Zinc en bruto?

Cuando el elemento metálico Zinc, que se encuentra naturalmente en el aire, el agua y el suelo, se calienta junto con el oxígeno. Esta reacción química hace que el zinc se oxide. Una vez que ambos elementos se han evaporado y la fase de vapor se ha condensado en cristales, el resultado es el Óxido de Zinc: un polvo fino y blanco, que se sabe que transmite una carga eléctrica que tiene la reputación de exhibir numerosos beneficios para varios sistemas del cuerpo, incluyendo la iniciación y el apoyo de la síntesis de proteínas y la función metabólica, así como la producción de enzimas. Por estos efectos positivos, el Óxido de Zinc ha sido incluso un aditivo en los alimentos. Tiene resultados especialmente idóneos para la función cerebral e inmunitaria, la digestión y, sobre todo, para la salud de la piel. Es importante tener en cuenta que la materia prima de óxido de zinc de NDA está destinada únicamente a la aplicación tópica.

Aunque el óxido de zinc se ha utilizado tradicionalmente como ingrediente en una amplia variedad de productos químicos, electrónicos, industriales y domésticos -en concreto, adhesivos, baterías, cerámica, cemento, vidrio, lubricantes, pigmentos, plásticos, pinturas, pastas, cauchos y selladores-, sus cualidades calmantes, protectoras, espesantes y colorantes lo han convertido en un ingrediente popular para el cuidado de la piel. En esta industria, el Óxido de Zinc se utiliza principalmente en formulaciones para lociones y cremas, especialmente las destinadas a la aplicación tópica antes de las actividades al aire libre o de la exposición a la luz solar.

¿Cómo funciona el Óxido de Zinc en bruto?

Cuando se aplica de forma tópica, el Óxido de Zinc permanece en la superficie de la piel, formando una capa que funciona como agente protector, especialmente contra los efectos nocivos de la radiación UV y los irritantes ambientales. Esto lo convierte en un aditivo ideal para los productos para el cuidado de la piel, como lociones, cremas y ungüentos, especialmente los destinados a aplicarse antes de la exposición a los elementos, así como los destinados a calmar o prevenir el picor, las infecciones y los daños en la piel.

Las propiedades antisépticas y astringentes del Óxido de Zinc actúan conjuntamente para ayudar a reducir el riesgo de infecciones bacterianas, reduciendo la permeabilidad de la piel y obstruyendo así el camino de las bacterias antes de que puedan adherirse o ser internalizadas por el cuerpo. Esto permite una curación más rápida de las quemaduras menores, las heridas superficiales y las verrugas.

Sus propiedades espesantes, hidratantes, calmantes y tensoras lo han hecho popular para añadirlo a una amplia gama de productos para el cuidado de la piel, como el maquillaje, los champús anticaspa y los productos para las uñas. Cuando se aplica cosméticamente, mantiene la piel hidratada y retrasa la aparición de los signos del envejecimiento al aportar humedad; además, ayuda a equilibrar la producción de grasa de la piel, lo que evita que ésta aparezca brillante. Además, reduce la apariencia de los poros dilatados, mejora la síntesis de colágeno así como la regeneración del tejido conectivo, y equilibra el tono de la piel, lo que iguala la pigmentación.

El Óxido de Zinc se encuentra comúnmente en los productos para el cuidado de los bebés, como las cremas y polvos para la dermatitis del pañal, en los jabones, en los protectores solares y en los polvos para los pies por su capacidad de formar una barrera protectora en la piel. Es un ingrediente conocido por tratar el picor, el ardor, la inflamación, el enrojecimiento, la sequedad, la descamación y el dolor característicos de las afecciones de la piel, como las picaduras, la caspa, el acné, el eczema, la dermatitis, la rosácea y las erupciones cutáneas.

APLICACIONES DEL ÓXIDO DE ZINC

El Óxido de Zinc no es soluble en agua, por lo que requiere un aceite u otro agente portador de este tipo para funcionar eficazmente.

CONTRAINDICACIONES DE LA MATERIA PRIMA DE ÓXIDO DE ZINC

Como todos los demás productos de New Directions Aromatics, la materia prima de óxido de zinc es sólo para uso externo. Es imprescindible consultar a un médico antes de utilizar este producto con fines terapéuticos. Se aconseja especialmente a las mujeres embarazadas y en período de lactancia, así como a las personas con piel sensible, que no utilicen la Materia Prima de Óxido de Zinc sin el asesoramiento de un médico. Este producto debe almacenarse siempre en una zona inaccesible para los niños, especialmente los menores de 7 años. Las personas alérgicas a lo siguiente deben evitar el uso de Óxido de Zinc: Zinc, Aceite Mineral, Cera, Vaselina, Aceite de Hígado de Bacalao, Dimeticona, Lanolina o Parabenos.

Antes de utilizar la Materia Prima de Óxido de Zinc, se recomienda realizar una prueba cutánea. Esto puede hacerse disolviendo 1 cucharadita de Óxido de Zinc en 1 cucharadita de un aceite portador preferido (excepto Aceite Portador de Linaza) y aplicando una cantidad del tamaño de una moneda de diez centavos de esta mezcla en una pequeña zona de la piel que no sea sensible. El Óxido de Zinc no debe utilizarse nunca cerca de los ojos, en el interior de la nariz y los oídos, ni en ninguna otra zona de la piel especialmente sensible. Los posibles efectos secundarios del Óxido de Zinc incluyen dificultad para respirar, hormigueo, picor, urticaria e hinchazón, especialmente de los labios, la cara, la garganta o la lengua. En caso de reacción alérgica, interrumpa el uso del producto y acuda inmediatamente a un médico, farmacéutico o alergólogo para que evalúe su salud y tome las medidas oportunas. Para prevenir los efectos secundarios, consulte con un profesional médico antes de usarlo.

Advertencia: Cuando se calienta en combinación con polvo de aluminio, polvo de magnesio o aceite portador de linaza, el óxido de zinc tiene fama de tener una reacción potencialmente explosiva y podría provocar un incendio.